En tiempos de barbarie el diablo cita a su favor las escrituras. Se sabe que los pueblos no tienen los gobiernos que se merecen, sino los que se le parecen, incluso los que se le parecen por la parte más baja. Una arquitectura jurídica sofisticada también puede ayudar a sostener esas bajas pasiones. Especialmente cuando desaparecen los garantes mayores de la ética cívica, el cielo de categorías universales que cobijaba las multitudes. La emergencia masiva de un temple fascista, alienta ese pesimismo sobre las “sagradas” mayorías que alertaba Alexis de Tocqueville hace años. Muchas elecciones hubo desde entonces, y ninguna desmereció aquella profecía sobre la “Collective mediocrity”. En ocasiones, también canalizó la “collective” malignidad represada en las honduras de esas mayorías. Aunque Hitler es Aquel que murió por todos los pecadores, la mayoría de los pecadores fueron salvados (muy pocos afrontaron el liviano Tribunal de Nuremberg; m...
“ Tal vez la historia no sea más que la diversa entonación de unas pocas metáforas ” La esfera de Pascal, J.L.Borges